martes, 9 de diciembre de 2008

ocho haiku

Pereza y vicio
Dispersa tu silueta
Cuando despiertas.

El rojo ocaso
Efímero y distante
Hiere los ojos.

La muerte ignora
Codicias e ilusiones.
Su ley es justa.

Si los suicidas
Con lucidez juzgasen
Serían legión.

No es la existencia
Indagación ni juicio.
Es incidente.

Vuelvo a tu cuerpo.
Allí yace escondido
El verso esquivo.

Cinco monedas,
Un reloj y una bala
Insisten quietas.


Soy invisible.
Un tren rasga la noche.
La lluvia atrasa.

2 comentarios:

Germán dijo...

Què dice Don?...como ya es habitual en mi rutina, dejo mi festejo.Saludos sureros.

Flores Literarias dijo...

excelente