viernes, 11 de julio de 2008

oxidación 47

Como un puñado de neutrinos distraídos
Se ha fugado otro año
Hacia esa nada con mapa
Que deseamos pasado.
La simetría alcohólica del devenir
Impone sus íconos afables:
Relojes de arena,
Espejos enmohecidos,
Bitácora de derrotas.
Pero el silencio se desata
Como un grito en un laberinto ciego.
Y de nuevo sospecho ser
Un anónimo espía kafkiano
De mi propia existencia.

1 comentario:

Natalia Molina dijo...

Lo saludo, Poeta, y celebro sus palabras.